El vacío que todos tenemos y pocos aceptamos

El vacío que TODOS tenemos pero que POCOS aceptamos… en automático capta nuestra atención y a la vez nos causa curiosidad… Pero no, no es una nota corta venas. Va mucho más allá de eso.
Hablemos con verdades, con «netas», como diríamos en mi México ¿quién nunca ha sentido ese hueco en el estomago de sentir que algo nos «falta»?
Las causas pueden ser muchas, lo que es igual para todos es ese sentimiento de vacío, la ansiedad que ocasiona y la nostalgia que trae consigo. Y lo peor de todo, no es sentirlo, sino pretender ocultarlo.
Durante el fin de semana pensaba todo acerca de este «vacío» y los sentimientos y pensamientos a los que me lleva… y la realidad, es que fue de esos momentos en los que te cuestionas TODO… ¿Estaré tomando el rumbo correcto? ¿Qué va a ser de mí en 5 años? ¿Lograré independizarme?
Y bueno, la lista continúa y continúa… En un instante me pareció todo TAN gris, minimizando todo lo BUENO que hoy en día ocurre en mi vida. ¿Es realmente justo dejarnos someter por nuestros vacíos?
Cada uno, lo hace de diferente manera, pero ninguna de nuestras fugas suele darnos esa calma absoluta. Y en ese afán de querer encontrar una «respuesta», tendemos a justificar… Sabes que digo la verdad, pero nos cuesta asimilarlo. Aceptar que somos humanos y que nos equivocamos y mucho. ¿Por qué siempre querer ser perfectos?
Entre toda esta nube de pensamientos, recordé tenía en algún lugar de mi habitación el libro de «El Caballero de la Armadura Oxidada». Empece a leerlo y pronto recordé por que es uno de mis preferidos. Entre mis citas favorita, esta la siguiente:
“Ponemos barreras para protegernos de quienes creemos que somos. Luego un día quedamos atrapados tras las barreras y ya no podemos salir”.
Y pensé en esos momentos donde he querido protegerme, a veces con o sin razón. Como ese «bloqueo» me hace caer constantemente, en una zona de confort. Donde es más fácil abrumarme de trabajo que tener un espacio libre solo para sentir… Por que atreverse a sentir miedo, incertidumbre y soledad, no es fácil pero es lo que nos hace CRECER.
Caí en cuenta que mientras más dejaba de querer «controlar» cada aspecto de mi vida y me permitiera, inclusive, disfrutar mis equivocaciones, me sentía mejor. Y es que la respuesta obvia, es la aceptación, pero en el proceso ¿qué tan fácil resulta aceptarnos? A la mayoría, nos cuesta y mucho…
Otra gran verdad, tan delicadamente dicha, es la siguiente:
“El caballero lloro más al darse cuenta de que si no se amaba, no podía amar realmente a otros. Su necesidad de ellos se interpondría. En eso apareció el mago y le dijo: solo podrás amar a otros en la medida en que te ames a ti mismo”.
¿Te suena familiar ese vacío? La respuesta la dejo solo para ti.
Hoy, analiza el ritmo de vida que llevas y lo que hay en ella. Siente lo que si te hace feliz y lo que no. Y cuestiónate, cuántas veces tu no haz juzgado, criticado y caído en malas actitudes contigo mismo y los demás… Y ahora, que eres consciente ¿que harás al respecto?
Aprende a escuchar y conocer la verdad de ti mismo. Ámate y no esperes que los demás llenen esos «espacios» en ti. ¿Cómo dejar a cargo de alguien más, tu propia felicidad?
Este artículo esta protegido por la Ley Federal de Derechos de Autor, si copias información de este sitio en tu página web es necesario agregues una liga y me cites como fuente.
Foto – Portada: Photo by Artem Kovalev on Unsplash
Carlos A. Zarate R.
te felicito lolita por la manera que escribes y por lo que sientes por la vida y por viajar orgullosa de tu estado y tus raices
Lolina Rivas
¡Hola Carlos! ¿Cómo estás? Como campechana, no puedo sentir más orgullosa de esta tierra hermosa. ¡Gracias por tu comentario! ¡Un abrazo!